El cine a través del vestuario: Blade Runner, una influencia eterna

La moda y el vestuario en Blade Runner: una influencia eterna

Hola queridísimas ladys, hoy os traemos una entrada de película, como sabéis, en Lady Cactus nos encanta la moda y el cine, por eso hoy os vamos a hablar de uno de los films imprescindibles para todo amante del séptimo arte y su influencia en la moda.

Blade Runner es una de las películas más icónicas y revolucionarias del cine de ciencia ficción, pero también lo es del cine de moda. Desde su estreno en 1982, la obra maestra de Ridley Scott ha inspirado a numerosos diseñadores y estilistas con su estética futurista, noir y punk, que combina elementos de la cultura oriental, el cine clásico y la tecnología. El resultado es un universo visual único y fascinante, que ha marcado un antes y un después en la historia del vestuario cinematográfico.

El responsable de crear los trajes de Blade Runner fue Michael Kaplan, un joven diseñador que había trabajado anteriormente en Flashdance y que se enfrentó al reto de imaginar cómo sería la moda en el año 2019, fecha en la que transcurre la película. Kaplan se basó en las ilustraciones del artista Syd Mead, que colaboró con Scott en el diseño de producción, y en las referencias que le proporcionó el director, como el cine negro de los años 40, la cultura japonesa y el movimiento punk.

El resultado fue una mezcla de estilos y épocas, que reflejaba la diversidad y el caos de una sociedad distópica, donde los humanos conviven con los replicantes, unos androides casi indistinguibles de los humanos, que son perseguidos por los blade runners, unos agentes especiales encargados de eliminarlos.

Los personajes principales de la película tienen un vestuario muy definido y característico, que refleja su personalidad y su rol en la trama. El protagonista, Rick Deckard (Harrison Ford), es un blade runner retirado que viste como un detective clásico, con una gabardina impermeable, un traje gris, una camisa blanca y una corbata. Su aspecto es sobrio y funcional, acorde con su trabajo y su carácter taciturno.

La coprotagonista, Rachael (Sean Young), es una replicante que trabaja para la corporación Tyrell, que fabrica a los androides. Su vestuario es una reinterpretación del estilo femme fatale de los años 40, con trajes de falda y chaqueta, sombreros, guantes y abrigos de piel. Su ropa es elegante y sofisticada, pero también fría y rígida, como su expresión. Su peinado y su maquillaje recuerdan a las divas del cine clásico, como Greta Garbo o Marlene Dietrich.

Los otros replicantes que aparecen en la película tienen un vestuario más extravagante y vanguardista, que refleja su rebeldía y su libertad. Roy Batty (Rutger Hauer), el líder de los androides fugitivos, viste una chaqueta de cuero negro con hombreras, unos pantalones cargo y unas botas militares. Su ropa es oscura y agresiva, como su actitud. Pris (Daryl Hannah), su amante, es una replicante diseñada como una “máquina de placer”. Su vestuario es una combinación de elementos punk, góticos y fetichistas, con mallas rasgadas, corsés, medias de rejilla y maquillaje blanco y negro. Su aspecto es provocativo y sensual, pero también infantil y vulnerable.

La influencia de Blade Runner en la moda ha sido enorme y constante, desde su estreno hasta la actualidad. Muchos diseñadores han rendido homenaje a la película en sus colecciones, recreando o reinterpretando los looks de sus personajes. Algunos ejemplos son Alexander McQueen, que dedicó su colección de primavera-verano 2003 a Rachael, con trajes de corte masculino, sombreros y labios rojos; John Galliano, que se inspiró en Pris para su colección de otoño-invierno 2009, con mallas rotas, corsés y maquillaje dramático; o Gareth Pugh, que recreó el ambiente oscuro y futurista de la película en su colección de otoño-invierno 2016, con prendas de cuero, vinilo y plástico.

La película también ha influido en el street style, especialmente en las subculturas urbanas como el punk, el gótico o el cyberpunk, que han adoptado elementos del vestuario de Blade Runner, como las chaquetas de cuero, las botas, las mallas, los sombreros o los maquillajes. Además, la película ha anticipado algunas tendencias que se han popularizado en los últimos años, como las prendas hechas con materiales plásticos, las pieles sintéticas, las botas altas o los pantalones cargo.

Blade Runner es, sin duda, una película de culto para los amantes del cine y de la moda, que ha creado un estilo propio y reconocible, que sigue vigente y actual. Su secuela, Blade Runner 2049, estrenada en 2017, ha continuado con el legado de la original, manteniendo su estética y su influencia, pero adaptándola a los nuevos tiempos y a las nuevas generaciones. La moda y el vestuario en Blade Runner son un ejemplo de cómo el cine puede trascender la pantalla y convertirse en una fuente de inspiración y de expresión para la sociedad.

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• Para el look de Pris, la replicante rebelde y sensual, te sugerimos esta Chaqueta tipo americana con estampado de cebra, solapas negras y logo en la espalda de Noc The Brand.